El 6D vamos a ganar como es: con nuestros votos

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Estamos apenas a 25 días del 6 de diciembre, fecha en la que los venezolanos acudiremos a expresar con contundencia que queremos un cambio de rumbo para nuestra Venezuela, porque tenemos claro quién es el responsable de que estemos sumergidos en la más profunda crisis económica, social y política de nuestra historia.

Así lo dicen las encuestas, la desaprobación del gobierno está en 75% y el 68% piensa que el responsable de la situación es el gobierno de Nicolás Maduro.

¿Cómo es posible que en un país rico, que en los últimos años vivió la bonanza petrolera más importante, no se hayan invertido los recursos en generar oportunidades y progreso para el pueblo? ¿Cómo es posible que en nuestra Venezuela, a pesar de que ingresaron más 800 mil millones de dólares por la bonanza petrolera, haya gente pasando hambre, enfermos que agravan e incluso pierden la vida porque no encuentran su tratamiento o porque en los hospitales no hay insumos? ¿Cómo es posible que en este momento haya 300 mil universitarios sin clase porque 18 universidades autónomas públicas no han podido iniciar actividades, debido a que este gobierno irresponsable prefiere invertir en comprar y repotenciar aviones de guerra, en viajes y relaciones sociales, antes que en la educación de nuestros jóvenes?

No sólo tienen al país en una crisis que nos llevará a cerrar este año 2015 batiendo record, con la inflación y la escasez más alta de nuestra historia, sino que, con sus irresponsables acciones, están arriesgando también nuestro futuro.

En cada recorrido y casa por casa que realizamos, a diario, por los distintos sectores de nuestro estado se hace evidente que el gobierno de Maduro se ha olvidado de los venezolanos. Lo único de lo que se preocupan Maduro y sus candidatos es de hacer propaganda para tratar de mostrar un país que no existe. De lo único que se ocupan es de sabotear, hacer campañas sucias y hasta generar acciones violentas contra quienes sí trabajamos por los mirandinos. A este gobierno no le interesa el pueblo, sí así fuera no entorpecerían la entrega de recursos que son para beneficio de nuestras comunidades.

No hay venezolano al que no se le haga difícil ir al mercado, al que le alcance la plata o que consiga los productos; la violencia no pregunta de qué partido eres y nos afecta a todos. Y ¿por qué estamos así? Porque el Gobierno se encargó de expropiar empresas y tierras, de poner trabas a todo aquel que desea trabajar para salir adelante, desde los pequeños emprendedores hasta los grandes empresarios.

En nuestra Venezuela no se produce nada, casi todo lo que se consume es importado, pero ya tampoco hay dólares para importar y por eso hoy no se consigue nada. Este gobierno es tan miope e irresponsable que prefiere promover la inversión y el empleo en otros países, para ganar apoyos políticos, antes que invertir en el país e incentivar el esfuerzo privado. ¿Qué mejor demostración de que los problemas de los venezolanos no son una prioridad para Maduro, Cabello y sus candidatos?

Se aprovechan de los recursos y medios del estado, que en realidad son de todos los venezolanos y como siempre hacen uso del ventajismo. Pero sus promesas son siempre las mismas y con sus acciones demuestran su desesperación y el miedo que sienten porque saben que han perdido el apoyo del pueblo. Saben que el venezolano despertó y que reconoce en ellos a los responsables de esta crisis que nos agobia.

Han hecho hasta lo imposible por destruir a nuestro país, pero Venezuela lo tiene  todo para progresar, comenzando con lo más importante: nuestro recurso humano. Para salir adelante es necesario que este 6 de diciembre votemos a favor del cambio para contar con hombres y mujeres que entiendan y valoren todo nuestro potencial y se conecten con la realidad y las prioridades de los venezolanos.

Mientras los candidatos de la unidad estamos todos los días trabajando junto a las comunidades, no verán a los candidatos de Maduro y Cabello en las calles, porque no tienen cómo responder a la crisis que hoy estamos viviendo. Y es que ¿con qué cara visitan una casa y enfrentan a quien tiene la nevera vacía porque no tiene para el mercado?

Los candidatos del cambio, estamos aquí para escucharte y construir contigo las soluciones a los problemas. Desde la nueva Asamblea Nacional discutiremos los problemas, interpelaremos a los responsables, y velaremos porque cada bolívar que entre al país se invierta en obras que mejoren nuestra calidad de vida, y no terminen en manos de un grupito para su beneficio personal.

Escuchando a los venezolanos, trabajando juntos vamos a encontrar las soluciones a los problemas que nos afectan a todos. No será fácil, pero con voluntad, trabajando unidos y con las prioridades claras, no habrá obstáculo que no podamos superar.

Un diputado debe ser una persona preparada, comprometida y que conozca los problemas de la localidad, que tenga la fuerza para defender los derechos de todos. Por eso nosotros desde la AN vamos a legislar, controlar y discutir para promover el progreso de nuestra gente, porque primero son los venezolanos.

Desde la AN se aprobarán leyes que den prioridad al desarrollo de la producción nacional, la generación de empleo, la mejora del sector salud y de la educación. Legislaremos  para aumentar la producción nacional, incentivando el esfuerzo privado, porque queremos generar empleos y reactivar la economía para comenzar a superar esta crisis que hoy vivimos.

Trabajaremos para garantizar tu tranquilidad y la de tu familia, legislaremos para que los gobiernos locales puedan atender las prioridades de la comunidad en materia de servicios públicos como electricidad, agua, basura, transporte y asfaltado.

El 6 de diciembre, nosotros no vamos a ganar como sea, vamos a ganar como es: con votos. Si a algo hay que tenerle miedo es a no darnos la oportunidad de cambiar este presente que estamos viviendo.

¡Que nadie se sienta desanimado y derrotado! Estos 25 días que quedan hasta el 6 de diciembre debemos decirle a todos, amigos, familia, conocidos, que las elecciones parlamentarias son el primer paso para salir adelante. La respuesta está en tus manos y en las ganas que tienes de mejorar, por ti y tu familia.

Este 6 de diciembre sí haremos cola con gusto, para marcar la diferencia entre la vida que tenemos hoy y la queremos tener. ¡Miranda y Venezuela quieren cambio y el 6 de diciembre lo vamos a demostrar!

Somos millones los que queremos un país de oportunidades

Cada “nueva” medida que anuncia el gobierno lo que hace es asegurar la profundización de la crisis económica y social que sufrimos los venezolanos. A lo único que contribuyen los anuncios es a empeorar la ya deteriorada calidad de vida de nuestro pueblo.

Los venezolanos nos pregunadetamos a qué juegan Maduro, Cabello y sus candidatos. ¿Hasta dónde quieren llevar la ola de destrucción que han impuesto en nuestra Venezuela?

Tenemos la inflación más alta del mundo, una escasez 8 veces mayor a la considerada normal en cualquier país y un salario mínimo tan bajo que se necesitan 8,3 para adquirir la canasta alimentaria. Y como es ya costumbre la única respuesta del gobierno es más controles y seguir con el libreto de la guerra económica y sus sospechosos habituales. Con las medidas anunciadas las últimas semanas sólo buscan un efecto electoral pues las mismas no generarán mejoras, muy por el contrario, van a traducirse en más problemas, como ha ocurrido en el pasado.

Este gobierno definitivamente está cada día más desconectado de la realidad que vivimos los venezolanos, que estamos hartos de que nuestro día a día se vaya entre el no tengo y no me alcanza. En cada recorrido que hacemos por nuestras comunidades escuchamos los testimonios de la humillación y la tortura que significa para nuestras mujeres y nuestros hombres comprar los alimentos, productos básicos y medicinas para sus familias.

Este gobierno quiere ver a los venezolanos mendigando la comida que deberían tener garantizada porque tenemos un país que tiene todo lo necesario para producir. No solo tenemos una tierra bendecida, tenemos el mejor país del mundo y contamos con el mejor recurso humano que un país pueda tener.

Los venezolanos estamos cansados de la situación tan difícil a la que nos enfrentamos como consecuencia de las políticas equivocadas de este gobierno, que han desembocado en distorsiones, hangolpeado la productividad y mermado la calidad de vida de nuestro pueblo.

Hablan de Soberanía Alimentaria mientras mantienen retenidas toneladas de comida en  los puertos venezolanos, esperando para sacarlas en diciembre, otra medida electorera para chantajear al pueblo. Pero los venezolanos saben que su futuro y el de sus hijos valen más que una bolsa de comida. El gobierno cree que el pueblo es tonto, pero nada más alejado de la realidad. A diario, en nuestros recorridos, vemos que lo que el venezolano quiere es cambio.

¿Qué madre venezolana no quiere que sus condiciones de vida y las de su familia, mejoren? ¿Quién no quiere un país de oportunidades? ¿Quién no quiere garantizarle bienestar a los suyos?

Es por eso que estamos comprometidos contigo, con cada uno de los venezolanos, con esta lucha para lograr el cambio que nos permita tener un país de progreso y oportunidades para todos. A la vuelta de la esquina, con tu voto el #6D, iniciaremos el cambio de rumbo desde la Asamblea Nacional. Los hombres y mujeres comprometidos con el cambio trabajaremos por tí y los tuyos y seremos tu voz.

Desde la Asamblea Nacional, legislaremos para incentivar la producción nacional, para asegurar la distribución de los productos que consumimos los venezolanos. Para ello debemos eliminar trabas y facilitar trámites para la circulación y distribución de los alimentos y medicinas en el país, estableciendo temporalmente incentivos para la importación de los rubros que acá no se produzcan. Hay que apoyar a los pequeños y medianos productores venezolanos, dándole importancia al esfuerzo privado. Hay que devolver las empresas y los campos expropiados y ponerlos a producir, lo que también se traducirá en la generación de empleo.

Desde la Asamblea Nacional, legislaremos para brindar a los inversionistas seguridad jurídica para que inviertan en nuestro país y para incentivar la producción nacional.

Trabajando unidos podemos lograr estos objetivos y muchos más. Somos millones los que queremos un mejor país para nuestras familias, un país donde lo primordial sea el crecimiento de su población y no el enriquecimiento de un grupito. Esta meta está cada vez más cerca, y podemos alcanzarla todos juntos.

El primer paso lo daremos este 6 de diciembre, con nuestro voto haremos la diferencia por el cambio que el país quiere. Este seis de diciembre salgamos a votar.

¡Vamos a cambiar para progresar!

El 6D comienza el camino para cambiar crisis por progreso

Nu20151022_ADEestras madres en toda Venezuela hacen a diario magia para rendir lo poquito que tienen, entre el salario que cada vez alcanza para menos y la escasez que ha desaparecido hasta las caraotas.

En cada comunidad que visitamos, en cada conversación, está presente la desesperación porque el dinero no alcanza para alimentar a la familia. ¿Y cómo va a alcanzar si el 70% de los venezolanos gana salario mínimo, hoy todavía en 7.421,68 y a partir del 1 de noviembre en 9.648,18, mientras la canasta básica familiar está en Bs. 78.611,55. Ni una familia donde cuatro de sus integrantes ganen salario mínimo llega a cubrir sus gastos básicos.

Los 74 bolívares de aumento diario no alcanzan para un café o para una empanada, tampoco para el transporte diario de una familia o para el de una persona si tiene que trasladarse entre Caracas y Guarenas en transporte público.

La crisis que estamos viviendo los venezolanos ha llegado a niveles alarmantes y el Gobierno no hace nada para revertir esta situación, ni siquiera para desacelerar la caída, cada vez más veloz, de la calidad de vida de nuestro pueblo. Las neveras y los gabinetes en nuestras cocinas están cada vez más vacíos y tienen el descaro de decir que están protegiendo el salario de los venezolanos.

¿Protegiendo el salario? ¿De cuál protección hablan si la pensión de la tercera edad no alcanza para un mercado y comprar las medicinas? ¿Cómo se protege a una familia si no hay comida que comprar? Aumentar el salario mínimo como medida desesperada y aislada porque se saben perdidos en las elecciones parlamentarias, definitivamente no protege a nadie. Ni siquiera los protege a ellos de perder el 6 de diciembre, porque el pueblo está claro; nuestro pueblo sufre a diario las consecuencias de las desatinadas medidas del binomio Maduro-Cabello.

Maduro, Cabello y sus candidatos no han hecho más que burlarse de la necesidad de nuestro pueblo.¿Cómo pretenden que nuestro pueblo viva con 9.648,18 bolívares mensuales? ¿Estarían dispuestos ellos a vivir con menos de 10 mil bolívares al mes? ¿Estarían dispuestos a comer piedras fritas, como dijo recientemente el gobernador Rangel Gómez o a pasar el día en las “colas sabrosas” de Jaqueline Farías?

Tenemos la inflación más alta del mundo y una escasez que supera 8 veces lo que se considera normal para cualquier país. Un gobierno responsable y preocupado por su pueblo hace rato hubiera anunciado medidas de emergencia, pero el gobierno de Maduro insiste en buscar culpables y en desviar la atención, mientras sigue de cumbre en cumbre y de país en país, regalando los recursos de todos los venezolanos.

Además le mienten descaradamente al pueblo al afirmar que la inflación acumulada es de 80%, cuando la misma se calcula en 142% al mes de septiembre. Los venezolanos lo saben, lo sienten cada día en su bolsillo. Un gobierno como el de Maduro que se ha dedicado a destruir el salario no está en capacidad de rescatarlo y lo peor es que tampoco tiene la voluntad de hacerlo.

Los venezolanos están cansados de que este gobierno utilice la necesidad como chantaje. Desde la Asamblea Nacional podemos iniciar el cambio que Venezuela necesita. Desde la Asamblea Nacional trabajaremos para que el ajuste del salario deje de ser una medida aislada e improvisada y sea parte de un conjunto de acciones que realmente le devuelvan el poder de compra a las familias. Desde la Asamblea Nacional, legislaremos por un presupuesto justo donde estén claras las prioridades.

Los venezolanos necesitan una Asamblea Nacional compuesta mayoritariamente por hombres y mujeres comprometidos con el progreso del país y no preocupados por engordar las arcas personales de un grupito. Desde la Asamblea Nacional vamos a legislar para proteger las pensiones de las personas de la tercera edad, para que el dinero que reciban producto de una vida de esfuerzo les alcance. Desde la Asamblea Nacional, vamos a controlar el gasto del gobierno para garantizar que los recursos de los venezolanos se inviertan en el desarrollo de nuestra industria nacional, en la generación de empleo y de oportunidades para los venezolanos. Es fundamental para que el país salga adelante que se incentive la producción nacional y el esfuerzo privado, con un marco legal que genere confianza y no persecución.

Juntos los venezolanos tenemos la fuerza para salir de esta crisis. Nuestros hijos y nietos merecen tener un mejor futuro. El 6D es el primer paso para const
ruir un mejor país, porque con tu voto harás la diferencia entre la vida que tienes hoy y la que quieres tener.

Los venezolanos merecemos vivir bien y con la fuerza de miles que piensan como tú vamos a salir adelante. Este 6 de diciembre tenemos la oportunidad de iniciar el cambio de rumbo de nuestra Venezuela. Vamos a cambiar para progresar.

Nuestro futuro lo construimos juntos

Los venezolan20151014_adeos ven cada día cómo sus sueños se esfuman por la acción de un gobierno que parece tener como meta destruirlo todo a su paso. En 16 años han puesto la vida de nuestro pueblo patas arriba y sus “logros” nos colocan en los titulares por ser primeros en criminalidad, por estar de últimos en cuanto al comportamiento de nuestra economía, por tener el segundo salario más bajo de América Latina, después de Cuba.

Nuestro pueblo sufre el deterioro en cada aspecto de su vida, en el acceso a la salud, en la posibilidad de dar a sus hijos una educación de calidad, en su alimentación, en el acceso a servicios básicos como el agua y la electricidad.

El gobierno puede decir misa y gastar los millones, que no invierte en dar soluciones al pueblo, en cadenas y publicidad para ocultar su ineficiencia, pero nada puede tapar lo que sufrimos cada día los venezolanos. ¿O es que una valla o una cadena resuel
en el problema a tantas familias venezolanas que viven en construcciones improvisadas o temporales, o arrimadas en la casa de un familiar porque no tienen cómo acceder a una vivienda de calidad?

El derecho a la vivienda está consagrado en el artículo 82 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela: “Toda persona tiene derecho a una vivienda adecuada, segura, cómoda, higiénica, con servicios básicos esenciales que incluyan un hábitat que humanice las relaciones familiares, vecinales y comunitarias. La satisfacción progresiva de este derecho es obligación compartida entre los ciudadanos y ciudadanas y el Estado en todos sus ámbitos. El Estado dará prioridad a las familias y garantizará los medios para que éstas y especialmente las de escasos recursos, puedan acceder a las políticas sociales y al crédito para construcción, adquisición o ampliación de viviendas”.

¿Conocerán los señores del gobierno el texto constitucional? Todo parece indicar que no, porque lo violan a diario descaradamente.

Durante 16 años se han dedicado a despilfarrar los recursos de nuestro pueblo, lo han empobrecido, lo han alejado de sus posibilidades de progreso, del derecho de acceder a una vivienda de calidad y de sentir la tranquilidad de dejar a sus hijos y nietos un techo para su futuro.

Este gobierno ha acumulado una gran deuda social, el déficit de vivienda se calcula en 3 millones de unidades. Pero además, la pérdida de valor del salario, la escasez y los controles con los que pretenden regular la vida de los venezolanos, hacen cada vez más difícil adquirir una vivienda, alquilar y hasta realizar mejoras en el hogar. Un apartamento sencillo de 2 habitaciones no cuesta menos de 15 millones de bolívares Con un sueldo mínimo de 7 mil 422 bolívares, tendríamos que ahorrar más de 160 años de sueldos para comprarla y no hay manera de acceder a un crédito.

Este gobierno olvidó que la vivienda es más que paredes y techos, que se requieren terrenos seguros y proyectos planificados para garantizar a las familias condiciones óptimas de vida, con todos los servicios, con vialidad, acceso a la salud, a la educación y hasta a un empleo cercano al sitio donde se vive. Sólo así se logrará una solución de largo plazo y no una que al poco tiempo se convierta en un problema para las familias.

Y es que no se trata de cuántas casas “regalen”, se trata de que no entregan a las familias el título de propiedad, por lo que nadie es propietario y su casa termina dependiendo de un chantaje político.

Por eso desde la Asamblea Nacional impulsamos una ley para la entrega de la titularidad de la tierra para que puedas dejar a tus hijos aquello que tanto te costó conseguir. Claro que podemos tener un país de propietarios, pero tenemos que trabajar unidos para lograr el triunfo el 6 de diciembre.

El cambio sí es posible. No podemos seguir permitiendo que el dinero que debe invertirse en obras de calidad vaya a los bolsillos de un grupito, es posible cambiar y desde la Asamblea Nacional lo vamos a lograr, porque ahí se debatirán los problemas que afectan a todos los venezolanos, se legislará para todos por igual y nos dedicaremos a trabajar para crear leyes que garanticen la posibilidad de obtener los títulos de propiedad de las viviendas y para que alquilar vuelva a ser una opción.

Sabemos que parece difícil pero esto va a cambiar. No estamos condenados a seguir viviendo así. Sabemos que podemos construir un mejor futuro y juntos lo vamos a lograr. ¡Vamos a cambiar para progresar!

El futuro lo construimos con nuestras manos

L12agoblog3os venezolanos no podemos descansar mientras haya familias a las que sus derechos más elementales les son vulnerados, a diario, por un gobierno irresponsable, que en 16 años ha despilfarrado los recursos de nuestro pueblo, empobreciéndolo, alejándolo de sus posibilidades de progreso, del acceso a la salud, del derecho de acceder a una vivienda digna, del derecho a escoger qué, cómo y cuándo comprar, de la posibilidad de sentirse seguro y tranquilo.

Este gobierno, se ha acostumbrado a mentir, reciclando promesas en tiempos de elecciones y colocando pañitos de agua tibia, en lugar de buscar soluciones reales y definitivas a problemas que continúan agravándose. Ha despilfarrado y robado los recursos de los venezolanos, llevándose por delante sus derechos y aspiraciones.

A pesar de decirse socialista, este gobierno tiene una enorme deuda social, muestra de ello es el déficit de vivienda, que se calcula en 3 millones de unidades. A esto se suma que más del 60% de las viviendas es autoconstruida en malas condiciones de habitabilidad, según el reciente estudio de condiciones de vida en Venezuela, realizado por la UCAB, la UCV y la USB.

La inflación, la pérdida de valor del salario, la escasez y los controles que pretenden regular todos los aspectos de la vida de los venezolanos, han hecho que la posibilidad de adquirir una vivienda sea cada vez más lejana, como también lo es la de alquilar e incluso la de emprender un proyecto de ampliación o mejoras.

La vivienda es un derecho, una necesidad, primaria del ser humano y engloba mucho más que paredes y techo. Por eso siempre hemos sostenido que el tema de la vivienda debe abordarse de forma integral. Además de la construcción de viviendas con condiciones óptimas, deben generarse políticas que permitan que los venezolanos vuelvan a tener la posibilidad de alquilar una vivienda.

No se trata de levantar por generación espontánea paredes y techos. Hay que contar con terrenos seguros, aptos para el desarrollo de ciudades planificadas que garanticen la calidad de vida de sus habitantes y se conviertan en centros a partir de los cuales se dinamice la economía. Una vivienda, requiere servicios, como agua, electricidad, sistema de aguas servidas, vialidad, aceras, transporte público, facilidades de comunicación, espacios de esparcimiento, comercios, escuelas, servicios de salud. Sólo así podemos asegurar una solución de largo plazo y no una que en poco tiempo multiplique los problemas de las familias.

La falta de planificación que se ha impuesto en algunos de los proyectos, para crear la ilusión de que se está atendiendo el tema de la vivienda, hacen que a menos de dos años de su edificación, unidades habitacionales presenten problemas que colocan a sus habitantes en situaciones incluso más precarias que las que tenían anteriormente. No sólo se evidencian problemas en las estructuras, también  existen importantes carencias en cuanto a servicios y acceso a educación, a un empleo, a la salud.

La deuda que acumuló el gobierno en materia de vivienda también afectó a los mirandinos. Por ello, a pesar de sus intentos por alejarnos de nuestro objetivo, hemos trabajado sin descanso para buscar alternativas que nos permitan dejar atrás la informalidad, el uso de materiales inadecuados y las estructuras riesgosas que encontramos al inicio de nuestra gestión. Nuestros Certificados de Materiales de Construcción surgieron para dar respuesta, cuando el Gobierno Central transfirió los proyectos y obras habitacionales del Ejecutivo regional al Ministerio de Vivienda y Hábitat.

Miranda no es una isla en nuestra Venezuela. Manejamos un presupuesto deficitario y también nos enfrentamos a la escasez de materiales de construcción. La tarea no ha sido fácil, pero si algo nos sobra es voluntad: 275 mil mirandinos se han beneficiado con nuestros planes de vivienda, hemos entregado 48 mil 656 Certificados de Materiales de Construcción, mil 106 familias han adquirido vivienda en mercado primario o secundario con Certificados Mirandinos, hemos beneficiado más de 15 mil personas tramitando más de 3 mil títulos relacionados con la propiedad y hemos formado mil 578 mirandinos en nuestra escuela de constructores populares.

Todavía queda mucho trabajo por hacer y estamos seguros de que con una Asamblea Nacional que vele por los intereses del pueblo, donde no se use el poder para pasar factura a quienes piensan distinto, se logrará dar el apoyo necesario a las iniciativas de mejoramiento urbano y consolidación de viviendas, que buscan abordar de forma integral esta problemática.

Garantizar que todos y cada uno de los que vivimos en esta tierra tengamos oportunidades, calidad de vida, una vivienda segura, sí es posible. El próximo 6 de diciembre tenemos la oportunidad de elegir una Asamblea Nacional que trabaje por el pueblo; que le ponga un parao a los abusos y nos encamine hacia el cambio. El futuro lo construimos con nuestras manos. #UniónYCambio

Honor a quién honor merece

Bastante segura estoy que muchos de nosotros hemos adorado a nuestros abuelos y los momentos que pasamos con ellos los guardamos en un lugar muy especial de la memoria. ¿Cómo no hacerlo? Son portadores de sabiduría, relatos de la juventud de nuestros padres y pilares especiales de la familia.

Por eso, he visto con agrado que cada día, mayor número de organizaciones, municipios y estados estén interesados en darle un giro importante al estatus social de los abuelos venezolanos, brindándoles bienestar.

En Miranda, nosotros hemos tenido esa  visión integradora y la hemos canalizado a través de una institución que quiere vincular activamente alternativas en diversas áreas que garanticen el bienestar y  respondan positivamente a los intereses de nuestros adultos mayores, ayudándolos a fortalecer sus condiciones físicas y sociales:  Abuelos Miranda, que desde 2009 hasta la actualidad, ha activado programas para dar alimentación, salud preventiva, recreación, deporte y capacitación  a más de 2 mil adultos mayores.

Tenemos un total de 37 Casas de Abuelos  en pleno funcionamiento en la entidad, distribuidas de  en el Área Metropolitana (3), Altos Mirandinos (1), Guarenas-Guatire (1), Valles del Tuy (9) y  en Barlovento (23). En ellas, la tercera edad, recibe una mirada de respeto al esfuerzo y trabajo realizado durante sus «años mozos» construyendo su familia y sacándola adelante. Queremos que el respeto y la tranquilidad sean parte de su vejez.

En Miranda le llamamos progreso a la calidad de vida, a la tranquilidad, a la seguridad alimentaria, al acceso a la salud, en fin, en Miranda hacemos del progreso una realidad para todos por igual.

En 3 años hemos acondicionado 23 Casas de Abuelos en todo Miranda. Debemos honor a quien honor merece.
La calidad de vida no tiene edad, en Miranda llevamos progreso a todos por igual.

Para los que gustan de datos numéricos:

·  Se han realizado más de 2 mil 600 jornadas de peluquería y barbería para adultos mayores.

·  Más de 5 mil paseos de esparcimiento efectuados

·  Diferentes operativos médicos, jornadas de seguimiento nutricional, vacunación  y consulta en materia fisioterapéutica, acumulan un total de 15 mil 255 atenciones para abuelos de Miranda.

·  Más de 5 mil asistentes a las Casas de Abuelos han participado en clases de Taichi y Bailoterapia.

·  En materia de Alfabetización Inicial se registran más de  2 mil  capacitaciones para personas de la tercera edad.